La Esposa Deliberada

“La mujer sabia edifica su hogar…”- Proverbios 14:1

Recientemente terminé un Reto de 30 días en los cuales debía evitar decir cosas negativas sobre mi cónyuge y resaltar una característica positiva diariamente. Cada día, leía por la mañana una reflexión y debía expresar agradecimiento o admiración por las diferentes cualidades positivas de mi esposo. Durante los últimos días del Reto, meditaba en cómo el pensar de manera intencional sobre el tema del Devocionario incluido, provoca la renovación de la mente y ayuda a obrar de manera agradable a Dios.

Una clave del Reto fue ser deliberada, hacerlo con toda la intención, confiando en la bondad de Dios, que se hacía notable cada día. “Deliberada” significa hacer algo de manera voluntaria, intencionada y a propósito. Cuando sometemos nuestra voluntad a la voluntad buena, agradable y perfecta de Dios, cosechamos buen fruto. Todo lo que hacemos es porque Él pone el querer hacerlo en nosotros (Filipenses 2:13). Él preparó de antemano nuestras buenas obras (Efesios 2:10).

Pero el que mira atentamente a la ley perfecta,
la ley de la libertad, y permanece en ella,
no habiéndose vuelto un oidor olvidadizo
sino un hacedor eficaz,
este será bienaventurado en lo que hace. – Santiago 1:25

Como esposas, estamos llamadas a edificar el hogar, lo cual significa buscar la sabiduría de Dios para hacer lo correcto en nuestro trato hacia el esposo. El matrimonio se fortalece cuando en lugar de criticar, mostramos agradecimiento y resaltamos las cualidades del esposo que reflejan el carácter de Cristo en él. Puede que pienses que tienes un buen matrimonio y que no te hace falta tomar pasos deliberados para fortalecer tu relación. La realidad es que todo matrimonio se beneficia del esfuerzo que le dedicamos para que sea una relación de acuerdo con lo que enseña la Biblia. Ser hacedoras eficaces de la Palabra nos hace bienaventuradas.

Ser deliberada no siempre será tarea fácil. Habrá momentos de desánimo y en los que pensemos que el esfuerzo solo proviene de nuestra parte. Necesitamos recordar que a nosotras nos toca hacer lo que nos corresponde y Dios es quien se encarga de tocar el corazón del esposo. Podemos confiar plenamente que Dios obrará de acuerdo con su buena voluntad y sabemos que a Él le agrada que los matrimonios se fortalezcan y crezcan. Una realidad que han experimentado muchas mujeres que han emprendido el reto de ser deliberadas en su pensar y hablar sobre el esposo, es que la respuesta del esposo hacia ellas ha mejorado, abriendo paso a la comunicación y las expresiones de afecto en la relación.

“Ella le trae bien y no mal
todos los días de su vida.” –
Proverbios 31:12

Recordemos que la Palabra asemeja a la esposa con un tesoro y dice que la mujer virtuosa le hace bien al esposo cada día. Que saquemos del tesoro de nuestro corazón buenas palabras que afirmen al esposo y le animen a hacer lo correcto por el matrimonio y la familia día tras día (Lucas 6:45). Podemos descansar en el Señor mientras seguimos buscando hacer Su voluntad. Recogeremos buen fruto si no desmayamos (Gálatas 6:9). Te invito a reflexionar sobre ser deliberada en tratar a tu esposo de una manera agradable a Dios. Él guiará tus pasos y te ayudará a lograrlo para que puedas testificar de Su obra en medio de tu matrimonio.

Leave a Reply

Fill in your details below or click an icon to log in:

WordPress.com Logo

You are commenting using your WordPress.com account. Log Out /  Change )

Twitter picture

You are commenting using your Twitter account. Log Out /  Change )

Facebook photo

You are commenting using your Facebook account. Log Out /  Change )

Connecting to %s

%d bloggers like this: