En cada etapa y en cada área de nuestra vida, necesitamos mantener una “actitud de estudiante”. En el matrimonio, debemos mantenernos estudiando al cónyuge para lograr comunicarnos y entendernos mejor. Cuando nos mantenemos aprendiendo, crecemos y maduramos mientras cumplimos el propósito de Dios para nuestras vidas.
View post to subscribe to site newsletter.